Esto es lo mejor que tiene un sábado por la mañana; rutita en bici y un colacao calentito con un buen mollete de Antequera.
Antes de esto hay que contar que nos hicimos 30 km por los pinos de El Portil. El campo esta estupendo después de tres o cuatro días de lluvia no demasiada intensa. La ruta ha sido variada, un poco de carril y un poco de sendero.
En uno de estos senderos tuvimos el único percance, y es que a Salva no se le ocurrió nada mejor que tirarse como un buen portero en uno de los poco charcos de agua que había. Al principio nos asustamos un poco por que se quejaba de la cadera y de la costilla, pero una vez en pie solo era el dolor del porrazo.
Reiniciamos la marcha no sin antes ver como había quedado el casco, menudo golpe, ¡ que importante es ir bien equipado!
Al final un buen susto y mas ganas de desayunar, y es que despues de todo hemos hechado una buena mañana.
Para la próxima esperamos que nos acompañen algún trinamita mas.
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